Beneficios y cómo prepararlo té de laurel

El laurel es una planta muy conocida por su uso en la cocina, especialmente para dar sabor a sopas, guisos y carnes. Sin embargo, lo que muchos no saben es que también puede consumirse en forma de té, y que esta infusión tiene propiedades medicinales que pueden ayudar a mejorar distintos aspectos de la salud. El té de laurel es una bebida sencilla de preparar y llena de beneficios naturales.

Uno de los beneficios más destacados del té de laurel es su poder digestivo. Esta infusión ayuda a aliviar problemas como la indigestión, la acidez y los gases. Tomarlo después de una comida copiosa puede favorecer una mejor digestión y evitar esa sensación de pesadez tan molesta.

También es conocido por tener propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, gracias a sus compuestos activos como los flavonoides y los aceites esenciales. Esto lo convierte en un aliado para aliviar dolores musculares leves, molestias articulares e incluso para fortalecer el sistema inmunológico. Su efecto calmante también puede ayudar a reducir el estrés y mejorar la calidad del sueño.

Otro uso popular del té de laurel es para regular los niveles de azúcar en la sangre. Algunas investigaciones sugieren que el consumo moderado de esta infusión puede beneficiar a personas con problemas de glucosa, aunque siempre debe consultarse con un médico antes de incorporarlo como parte de un tratamiento.

Preparar té de laurel es muy sencillo. Solo necesitas tres ingredientes:

3 o 4 hojas de laurel secas (preferiblemente enteras)

1 taza de agua

Opcional: un poco de miel o canela para darle sabor

Modo de preparación:
Hierve el agua y, cuando esté en ebullición, agrega las hojas de laurel. Déjalas hervir durante 3 a 5 minutos. Luego apaga el fuego, tapa la olla y deja reposar por otros 5 minutos. Cuela la infusión y bébela tibia, de una a dos veces al día.

Aunque el té de laurel es natural, no se recomienda su consumo excesivo ni prolongado, especialmente en mujeres embarazadas o personas con problemas renales. Como con cualquier remedio natural, lo ideal es tomarlo con moderación y siempre consultar con un profesional si hay dudas.

En resumen, el té de laurel no solo es reconfortante, sino también un recurso natural lleno de propiedades que vale la pena descubrir.