Así Me Liberé de 20 Problemas de Salud Solo Masticando Clavos

Masticar clavos de olor puede parecer una costumbre antigua o poco común, pero detrás de este pequeño hábito se esconden grandes beneficios para la salud. El clavo de olor, una especia originaria de Indonesia, ha sido utilizada durante siglos en la medicina tradicional por sus potentes propiedades medicinales. Al masticarlos en pequeñas cantidades, puedes aprovechar sus compuestos activos de forma directa y natural.

Uno de los principales componentes del clavo de olor es el eugenol, una sustancia con potentes efectos antiinflamatorios, antibacterianos y analgésicos. Gracias a esto, masticar clavos de olor puede ayudar a aliviar dolores de muela, reducir la inflamación de encías, combatir el mal aliento e incluso prevenir infecciones bucales. Además, su acción antimicrobiana ayuda a eliminar bacterias dañinas en la boca y el tracto digestivo.

Pero los beneficios van más allá de la salud bucal. Esta práctica también puede mejorar la digestión, aliviar la acidez estomacal, reducir los gases y favorecer el buen funcionamiento intestinal. Muchas personas afirman haber mejorado problemas respiratorios como la tos seca o la congestión nasal, gracias a la capacidad del clavo para calmar las vías respiratorias.

Además, el clavo de olor actúa como un antioxidante natural, combatiendo los radicales libres que dañan las células y contribuyen al envejecimiento prematuro y diversas enfermedades. También puede ayudar a regular el azúcar en la sangre, por lo que es útil como apoyo natural para personas con prediabetes o diabetes tipo 2.

¿Cómo masticarlos y con qué frecuencia?
Para aprovechar estos beneficios, basta con masticar uno o dos clavos de olor al día, preferiblemente en la mañana. No se recomienda consumir más de 2 o 3 unidades diarias, ya que un exceso puede causar molestias gástricas o irritación.

Otras formas de consumirlo:
Infusión digestiva de clavo de olor:

3 clavos de olor

1 taza de agua hirviendo

Opcional: una rodaja de jengibre o un poco de miel

Hierve el agua, agrega los clavos y deja reposar 10 minutos. Bebe esta infusión después de las comidas.

Aceite de clavo para uso externo:

Mezcla aceite esencial de clavo con aceite de coco.

Úsalo en masajes para aliviar dolores musculares o articulares.

Incorporar clavos de olor a tu rutina diaria es una forma natural, sencilla y poderosa de fortalecer tu salud en general.